sábado, 17 de enero de 2015

¿Qué piensan los hombres de la violación?

De la revista Muy Interesante, México.

¿Qué piensan los hombres de la violación?

Y qué pienso yo...?

Es una pena, pero al final la familia o el grupo social justifica al degenerado de turno, que por lo general visten con un traje a la medida de hombre respetable. No importa el nivel académico, el credo o la raza, se les suele dar toda clase de permisos y disculpas, se suele culpar a la víctima, a veces las mismas mujeres culpan a sus congéneres. También comete uno el error de ver como algo gracioso una agresión hacía una chica, como el "simple hecho" de tocarle el trasero a una desconocida... Alguna vez casi me matan por un cabrón que se pasó de la raya en un bar. En ese momento lo vi como un desliz de tragos y no vi motivo para que los amigos de la dama le partieran la cara por culpa de una "manito" inquieta. Así que intervine para que no lo lapidaran, mientras él, muy tranquilo y manisuelto, se retiraba en silencio dejándome encima a siete gigantones que por fortuna pude controlar con mi don de la palabrao a causa del miasma que despedían mis mis esfínteres que se derretían.
Hoy y siempre que recuerdo ese momento, me arrepiento de no permitir que aquellos caballeros que defendían la honra de su amiga, como todo caballero debería respetar la honra de cualquier mujer, le hicieran un favor a este degenerado "amigo mío" y le rompieran todos los huesos de su inmunda cara... nada más se merecía pues no fue la única conducta reprochable que dejé pasar por alto. Creo que también yo merecía la zurra por rodearme de asquerosos como ese, pues es tan culpable el el que hace como el que ve y calla.
Ahora que no es mi amigo, se me ocurre que el mundo está lleno de pendejos como él y nos hacemos los ciegos para no armar molestias. Estoy seguro de que ayer en la noche de fijo, todos ellos, disfrutaron de la compañía de sus cofrades y se llenaron la panza con las delicias de sus anécdotas e incluso comparten guayabo con mujeres que a pesar de conocer sus actos los ven como una bobada de tragos, pues en este caso como en muchos es más sencillo guardar silencio y meter la basura debajo de la alfombra para no arruinar una velada de amigos.